Lorenzo Peláez Suárez

«Innovando por el desarrollo rural del país»

Lorenzo Peláez Suárez es un tolimense nacido en Roncesvalles; egresado de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad del Tolima, cuenta con una Maestría en Desarrollo Rural y un Doctorado en Ciencias de la Educación en la línea de Desarrollo Territorial. Inició su trayectoria laboral trabajando en Cortolima y luego ingresó al ICA tras radicarse en el departamento del Huila; tras 22 años ejerciendo su carrera como Médico Veterinario, se desempeñó también como Gerente en la oficina del ICA del Huila; luego regresó a Ibagué a gerenciar la Corporación Colombiana de Investigación Agropecuaria (CORPOICA) de la cual, hasta el momento se encuentra gerenciando las áreas de Tolima, Huila, Caquetá, Putumayo, y una sección del Amazonas; en esta entidad investiga hacia el sector agropecuario y su principal oferta tecnológica busca el desarrollo agrario y el apoyo de las cadenas productivas en la región.

¿En qué consiste su cargo y cuáles son sus funciones?

“La corporación es una entidad que ha ido creciendo principalmente debido a que tenemos una responsabilidad grande con el país; tenemos 14 Centros de Investigación por toda el área geográfica de Colombia, los cuales manejamos desde acá. Tenemos una planta de personal compuesta por 180 colaboradores en el centro que específicamente son investigadores, agrónomos, veterinarios, economistas, y un gran porcentaje de ellos son profesionales con maestrías y doctorados que nos permiten llevar a cabo nuestra misión satisfactoriamente. La corporación tiene 3 funciones principales: ser motor de todo lo relacionado al sector agropecuario; ser actor y desarrollar investigaciones y convertirnos en un apoyo para todos los temas de asistencia técnica”.

¿Por qué decide especializarse en el desarrollo rural?

“Indudablemente cuando uno empieza a ejercer su carrera, como fue en mis inicios, veía que el campo colombiano no sólo como oportunidad de desarrollar mi profesión, sino también como una curva de aprendizaje y diversificación de conocimientos porque el campo es muy complejo; no sólo se refiere a lo agropecuario, tiene un alto contenido social y me parece que maravillosa esa posibilidad de ayudar a las comunidades rurales a buscar su desarrollo y a que tengan mejores condiciones de vida, por qué uno entiende finalmente que el ejercicio de su carrera no se trata sólo de maximizar la producción, sino también de preocuparnos por esas personas que merecen tener una mejor calidad de vida, y creo que ahí radica la estabilidad social que tanto necesita el país. En la medida que se deja el campo desatendido, los problemas de la sociedad colombiana aumentan y de esto hay precedentes históricos. De modo que creo que es nuestra responsabilidad social apoyar continuamente, pues pienso que el campo es fascinante, no sólo por su producción, sino por el turismo, el medio ambiente, la cultura, inclusive el arte; es un campo muy grande y se pueden encontrar muchas cosas. Desafortunadamente, al campo se le ha dado la espalda aquí en el país y eso nos ha costado muchas de las terribles situaciones que hemos tenido que vivir en busca de la paz y la convivencia entre nosotros”.

Cómo cree que ha evolucionado el índice de producción agrícola en el departamento durante la última década? 

“Es cierto que hemos pasado momentos difíciles; no somos ajenos al cambio climático. Por ejemplo, el fenómeno del niño por el cual pasamos hace poco es uno de los de mayor impacto en la producción. Se perdió aproximadamente el 30% de la producción normal, esto en cualquier sector del campo trae pérdidas económicas y desestabilidad tanto económica como social. Sin embargo, hoy en día, creo que estamos viviendo una coyuntura diferente en el país estando tan cerca de Bogotá y eso hace que la actividad agropecuaria se intensifique, ya que somos el segundo anillo de producción agrícola para la capital y cada día vamos activando más la articulación con el gobierno departamental, los gremios, el Ministerio de Agricultura y lo que hemos logrado, no sólo con la investigación agropecuaria, sino con la estructuración y alianza con entidades sociales y estatales de la región, donde buscamos la mejor manera de desarrollar el departamento, aprovechando toda esta infraestructura que hemos ido creando”.

¿Qué opina de las implicaciones de la reforma tributaria para el sector agro?

“Tiene sus puntos débiles y sus puntos fuertes, pero finalmente la posibilidad de una reinversión con nuevos impuestos al campo, me parece muy importante; el campo no es sólo agricultura y el propósito es percibir mayores ingresos de la nación para invertirlos en salud, educación e infraestructura del campo. Con esto, este sector podrá renacer siempre y cuando se cumplan las promesas que se están haciendo. Por otro lado, el país debe aprovechar el hecho de tener una gran biodiversidad que lo convierta en un productor de alimentos importante; considero que cualquier finca con una buena cabeza, se puede convertir en una empresa importante, Un  ejemplo de esto son los cafeteros de la región, quienes actualmente están produciendo café de alta calidad, el cual está haciendo subastado y exportado con categoría Premium a diferentes países del mundo. También la meseta tolimense recibió hace poco el certificado de arroz de alta calidad, y eso deberíamos lograrlo con los demás productos de la región”.

¿Cuáles son las expectativas en su cargo para el próximo año?

“Me llama mucho la atención poder seguir detectando las demandas que tiene el sector en ciencia y tecnología; cada vez lograr un mayor acercamiento con las comunidades y los gremios, que podamos captar esos requerimientos necesarios para hacer innovación; el objetivo de nuestra investigación es poder innovar, que el campo esté siempre abierto a la innovación por parte de las empresas de este mismo sector. Actualmente y a través de la captura de esta demanda, estamos ensamblando la Agenda Nacional de Ciencia y Tecnología con la colaboración de los gremios y los gobiernos departamentales; poder capturar estas demandas con certeza y una buena articulación institucional con los entes departamentales, con quien hemos venido trabajando muy bien, que podamos salir adelante y seguir trabajando por esos problemas que en el campo muchas veces se convierten en oportunidades para mejorar las condiciones, de modo que mientras mejoremos los procesos productivos, asimismo mejoramos la calidad de vida de los habitantes del campo”.

Hablando de innovación, ¿qué medidas toman ustedes para que estas nuevas iniciativas de innovación, no dejen de lado el cuidado del medio ambiente?

“Cada una de nuestras acciones debe tener ese componente de la parte ambiental, medir el impacto que generamos en los procesos productivos; pero en la medida en la que podamos ir maximizando, ese proceso para disminuir el impacto, nos va ir mucho mejor. Es por eso que cada proyecto tiene una parte de cuidado ambiental fundamental, a su vez que tratamos de recompensar al medio ambiente con otras iniciativas y acciones que tomamos”.

¿Cuál considera su mayor motivo de orgullo?

“La gente; mi mayor satisfacción no son mis alcances como gerente o mis logros en mi vida personal, sino como contribuyo a resolver los problemas del sector”. 

Para terminar, un consejo diario para maximizar la efectividad.

“Pienso que el optimismo ante todo; ser muy positivo y enfrentar cada día no como un problema, sino como un reto.  Que a partir de eso, uno deje buenas enseñanzas y experiencias en el proceso de resolución de cada obstáculo”.