“30 años ayudando a edificar la capital llanera”
Con más de 20 proyectos realizados que suman 1.000 unidades de vivienda y locales comerciales construidos en 100.000 m2, comprendiendo diferentes estratos, Inversiones Llano Hermoso celebra 30 años de trabajo en la región llanera. El encargado de llevar adelante esta organización ha sido Ricardo Javier Cala, un bogotano Ingeniero Civil de la Universidad de Los Andes, que llegó a Villavicencio en 1986 y después de colaborar en la construcción del Centro Comercial Los Centauros, decide junto a sus hermanos realizar un proyecto de vivienda. Este proyecto que por la época representaba un gran riesgo, fue realizado por etapas contando a su término con 74 apartamentos y 9 locales comerciales distribuidos en seis edificios de vivienda y uno de parqueaderos, llevando el nombre de “Multifamiliares Llano Hermoso”.
A partir de allí, el Ing. Cala se convierte en uno de los referentes en la construcción en la región; su vida profesional se ha desarrollado en empresas como Interplan Ltda, Grandicón S.A, Grupo Odinsa en el que fue Gerente de Operación Concesión Carreteras del Meta y Pedro Gómez S.A. como Gerente del Proyecto Unicentro Villavicencio. Así mismo, ha ido obteniendo grandes reconocimientos, el último otorgado en el Congreso Colombiano de la Construcción 2017, en el que se destacó su aporte al gremio siendo parte de los fundadores de Camacol en Villavicencio y siempre estando desde entonces al servicio de la Cámara.
Este ingeniero está casado con Clara Inés Blanco Martínez, tiene 3 hijas y siete nietos. Disfruta del deporte, el cual ha sido parte importante de su vida, practicando disciplinas como natación, esquí acuático, futbol, tenis y golf.
¿Cómo aporta Inversiones Llano Hermoso al departamento?
“Como primera medida los constructores somos grandes generadores de empleo tanto directos como indirectos. Así mismo, generamos dividendos a la ciudad por medio de los impuestos, destacándose los impuestos prediales que se generan con las nuevas construcciones. Particularmente Inversiones Llano Hermoso ha tratado en todos sus proyectos de entregar el mejor producto con el menor precio posible”.
Como integrante de la Junta Directiva de Camacol Meta ¿Qué opinión tiene del crecimiento de la construcción en la ciudad de Villavicencio?
“Inicialmente, Villavicencio tuvo un crecimiento bastante desordenado debido a que se desarrolló prácticamente sin planeación adecuada. Años después con la llegada de constructores profesionales y organizados, se le ha tratado de dar una nueva cara al desarrollo urbanístico de la ciudad. En Colombia, la gran mayoría de pueblos y ciudades se han desarrollado con más de un 60% de obras informales, y Villavicencio no es la excepción. Desde Camacol hemos insistido con las diferentes administraciones municipales que los constructores agremiados somos organizados y cumplidores de las normas y que queremos formar un equipo con el sector privado, el público y la docencia, para crear suelo urbano con normas claras que no necesiten interpretación sino ejecución”.
¿Qué representa para Villavicencio y el Meta la llegada de grandes complejos comerciales como el Centro Comercial Primavera Urbana?
“Aunque Villavicencio siempre ha sido una ciudad eminentemente comercial, la llegada de los Centros Comerciales, además de dar a los comerciantes oportunidad de mayor desarrollo de sus actividades, han contribuido a formalizar el comercio, dando también un aspecto de crecimiento y prosperidad a la ciudad”.
¿Cree usted que las constructoras deben diversificar sus proyectos y contemplar todos los estratos?
“Desde luego que sí. Sin embargo, es de anotar que la oferta de vivienda depende mucho del ciclo económico del momento, me explico, la demanda efectiva de vivienda de estratos bajos ha sido permanente, mientras que la vivienda de estrato alto varía mucho más de acuerdo con la capacidad de pago de la población. Históricamente en Villavicencio, los estratos que más hemos atendido los constructores han sido el 3 y el 4 principalmente, y el estrato 5 y 6 se ha desarrollado dependiendo de los momentos económicos del país y de la región. Últimamente, gracias al trabajo en equipo de Camacol con el Gobierno Nacional, léase Ministerio de Vivienda, se han desarrollado muchos programas de incentivos que han hecho posible realizar vivienda de interés social con cierre financiero. Es así como hoy en día, se tiene una variedad de oferta para todos los estratos”.
¿Cuáles son los sectores en los que cree falta mayor inversión en la ciudad?
“Lamentablemente, Villavicencio siempre ha sufrido mucho con los servicios públicos sobre todo en lo que se refiere a acueducto y alcantarillado. Este déficit ha frenado mucho el crecimiento en algunos sectores y también ha ocasionado que se desarrollen muchos acueductos privados, que solamente cubren el requerimiento de agua pero no cuentan con un buen alcantarillado de aguas residuales. Hoy en día, Villavicencio carece de una red de alcantarillado fluvial.
Por otro lado, el desarrollo vial también deja mucho que desear. Hay un déficit de la malla vial y la existente está en un alto porcentaje en muy malas condiciones, dado que prácticamente no se tiene mantenimiento de ella. Villavicencio requiere de una gran inversión que vaya al tiempo con el desarrollo y crecimiento de la ciudad”.
Actualmente ¿Cómo se encuentra la demanda de vivienda de Villavicencio respecto al resto del país?
“Con el boom del petróleo, se presentó un crecimiento de la ciudad con unos índices bastante superiores al resto del país, junto con Barranquilla. Lamentablemente, la caída de los precios del petróleo y la situación general del país ha ocasionado una baja considerable en la demanda de vivienda en los 2 últimos años. Si bien esa baja es general en todo el país, en Villavicencio se ha sentido con mayor rigor que en otras ciudades”.
¿Cómo imagina a Villavicencio en 20 años?
“Me imagino una ciudad de alrededor de 1.500.000 habitantes, con un desarrollo urbanístico bastante más ordenado que el actual, con mayores y mejores zonas verdes y una red vial que cuenta con un buen sistema de transporte masivo. También me la imagino como un destino turístico muy atractivo, dada la cercanía a Bogotá y una ciudad con un mayor desarrollo industrial para atender las necesidades de la Orinoquia”.
Metas para el año 2018.
“Para este año que ya nos llegó, la meta es continuar desarrollando el proyecto Los Cayenos en Acacías, al cual consideramos le quedan unos 2 o 3 años para su desarrollo completo. También esperamos iniciar un proyecto en Villavicencio”.
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